Tema del Mes > Octubre de 2012 |
Recuerdos acerca de mi maestra, analista y amiga, Andrea Dykes.
Por María Guadalupe Abac Archundia
Ese fue el primer punto de coincidencia de nuestro trabajo, en el que ella me ayudó mucho, para entender a Jung, para entender mis sueños. Aunque este mito de Medusa ella lo trabajó de una forma (a partir de la transgresión) y yo lo sigo trabajando de otra forma (antes de la transgresión), los nuestros fueron dos caminos diferentes que iban hacia el mismo punto, concordando en que este ser tan horrible significa también la posibilidad de crear, producir, germinar, no sólo la destructividad, y esto depende de cómo sea el desenlace de la situación psíquica específica (espero poder publicar un libro acerca de la sensualidad perversa, que es parte de mi trabajo alrededor de este mito). Había otra coincidencia... ella era artista pintora y, al igual que yo con el arte de la danza, desafortunadamente habíamos tenido que dejar la creatividad artística directamente, aunque ambas la volcamos en nuestro trabajo analítico. Para mí, las horas de análisis con ella fueron mi primera aventura hacia la profundidad del Ser y del Sí-mismo, encontrando ahí lo que más adelante, en mi vida, me iba a hacer un sentido profundo, que me ha sostenido todos estos años: ¡la creación! (como anécdota, mencionaré que cuando comencé a trabajar con ella en análisis mi inglés era bastante malo, y ella siempre tuvo la gentileza de poner el mayor empeño para comprenderme). Para conocer mejor a Andrea Dykes hay que leer su libro “El Mal” (publicado en español por Editorial Fata Morgana), que es una parte de su trabajo acerca del mito de Medusa. También de ella, consulten nuestro Tema del Mes de Enero de 2007, "Hacia la vida psíquica". Cuando ella regresó a Inglaterra, fueron pocas las veces que la visité, pero siempre fue muy amable al recibirme y trabajar con mis problemas y mis sueños. La última ocasión en que la consulté para algunos sueños fue en febrero de este año 2012; como siempre, sus sugerencias, sus reflexiones, me ayudaron y siguen ayudando a poder sostenerme en la confianza del Sí-mismo. Ella me contó que ya no trabajaba en sus sueños sino que prefería ahora hacer Imaginación Activa. Por alguna razón, mi Imaginación Activa nunca ha sido con palabras sino con movimiento, es por eso que me es más fácil la accesibilidad de los sueños. Andrea Dykes fue una mujer generosa, amorosa, muy entregada a su trabajo psíquico, a su jardín y a sus amigos. Un dato curioso: su voz se fue haciendo cada vez más dulce, como de una niña encantadora. Trabajó toda su vida para la creatividad, pero la íntima, no la espectacular, la creatividad del alma con sus pacientes. Yo le doy ahora las gracias a ella por su acompañamiento de todos estos años, y le doy un cálido adiós a la maestra, a la analista, a la mujer y a la amiga, Andrea Dykes. Para su obituario ella pidió la referencia al Salmo 104 (abrirá en una nueva ventana)...
http://www.missionstclare.com/espanol/psalm/104.html Y, mientras leen el Salmo 104, los invito también a escuchar algo de música de J.S. Bach "Jesu, Joy of Man's Desiring" (abrirá en una nueva ventana)... Dra. María Guadalupe Abac Archundia
Octubre de 2012 |